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Al escribir esta canción : me acuerdo el día que mis hermanos.Rafa y Felipe, entraron en quinta.
Esos días, los recuerdo como, unos de los días mas tristes para mi madre.
En la casa, hubo una gran fiesta, se invitaron a los amigos y recorrían el pueblo con gran alboroto, todos los mozos, era una bonita fiesta se hacían dulces y se bebía mas de la cuenta.
"Mas tarde, se acaba el alboroto, al tener que marchar ala mili."
Muchos de ellos, no habían salido de su pueblo, ni separarse de sus familias, no digamos de sus novias, que estarían un largo tiempo sin verla.
Canción de Quintos. Juan Berrocal Poblador
La quinta del treinta y uno, es una quinta , repollo
porque a entrado en quinta, el hijo del tío -Leopoldo.-El hijo del tío - Leopoldo,- el hijo del tío Adriaaa.
Y pá remate de feria, Benito el de del tío Pascual.
Benito, el del tío Pascual, junto a Nicasio el Dios
el Rute y el del Medio, que son - borrachos los dos.-
Dime que me quieres, muchacha, bonita,
dime que me quieres, que se va la quinta.
La quita se viene, la quita se va,
dime que me quieres, muchacha salaaa.
La quinta del treinta y uno, le a pasado un fracaso,que por culpa de la nieve, no pueden buscar el macho.
El macho ha de venir, el macho ha de venir
que los quintos, de este año, se tienen que divertir.
Dime que me quieres, muchacha, bonita,
dime que me quieres, que se va la quinta.
La quinta se viene, la quinta se va,
dime que me quieres, muchacha salaaa. Jose Sanchez Carrasco
Al entrar, en el corralillo, lo primero que se ve
al tío Pascual, con sus cabras y el macho quiere vender.
Nosotros se lo compramos, pero el nos pide mucho.
Nosotros se lo hacectamos.
Dime si me quieres, muchacha, bonita.
dime si me quieres, que se va la quinta.
La quinta se viene, la quinta se va,
dime si me quieres, muchacha salaaa.
Marin once de marzo dos mil trece. Leopoldo Berrocal Madruga
Segismunda Sanchez Roman. Mundi.
¡Hola Mundi!
ResponderEliminarQue guapetones los chicos eh!!! Y canción me hizo mucha gracia! La quinta se viene, la quinta se va,
dime si me quieres, muchacha salaaa.
Que tiempos aquellos, no cantaleábamos tanto... para ser felices, nos bastaba con que llegaran los chicos sanos y salvos a casa, y si era por Navidad, más todavía.
Este post me trae algunos recuerdos de amigos y parientes que se iban a la mili. Lloramos cuando se marchaban y no reíamos con verdadera alegría cuando regresaban.
Ha sido un placer pasar por tu puerto marinero.
Te dejo mi gratitud y mi estima siempre.
Se muy feliz.
Que mal!... quise decir, no necesitábamos tanto, para ser felices.
ResponderEliminarHOLA: MARINA, te estoy agradecida por ponerte a escribir, te echamos de menos, ya te lo dije en mi mensaje.
ResponderEliminarLos guapetones son, mi abuelo, mi suegro,mi padre , mi marido,
yo te espero en mi barca,de mi blog, como siempre para aprender de ti.
Un abrazo, no dejes nunca de deleitarnos con tus escritos.Besos. mundi.